Algunas de las granjas avícolas más importantes del mundo, entre toda su tecnología de punta, cuentan con un pequeño robot que recorre los corrales moviendo a las aves y mejorando su bienestar.
Se trata de un interesante desarrollo que está en fase piloto y que tiene a futuro un enorme potencial de recabar información para una avicultura de precisión, pero el dato clave es que ese robot, llamado Avisense, fue pensado, diseñado y fabricado en la ciudad de Córdoba.
Hasta hace pocos años, Lucas Jagodnik y sus socios tenían allí una empresa de demoliciones y lograron crear exitosamente un robot dedicado a esa tarea. “Nos quedamos con la idea de que en nuestro país se pueden crear cosas poderosas, que el talento sobra y lo que falta a veces es la transversalidad”, comenta en diálogo con Clarín Rural.