El ser humano podría vivir entre 1.000 y 2.000 años

Si la investigación en nuevas nuevas terapias genéticas consigue desentrañar por completo los mecanismos del envejecimiento, no solo ganaremos décadas de vida como se estima ahora, sino que podríamos llegar a cumplir entre 1.000 y 20.000 años.

Esta es la impactante idea que acaba de plantear João Pedro de Magalhães, catedrático de biogerontología molecular del Instituto de Inflamación y Envejecimiento de la Universidad de Birmingham, en el Reino Unido.

Lo que nos falta para conseguirlo, dice el investigador portugués, es aprender a reparar el ADN y a reprogramar las células para un proceso de envejecimiento drásticamente distinto. «Mi hipótesis es que tenemos un conjunto muy complicado de programas similar al de los ordenadores en nuestro ADN que nos convierten en seres humanos adultos».