Los científicos lograron echar un vistazo por primera vez a una muestra recogida del asteroide Bennu, cercano a la Tierra. Este tipo de asteroides suponen una amenaza para el planeta, por lo que comprender su composición y órbitas es clave para descubrir las mejores formas de desviar las rocas espaciales en curso de colisión con la Tierra.
Cuando la misión Osiris-Rex de la NASA utilizó brevemente un instrumento para perturbar la superficie de Bennu y recoger una muestra en octubre de 2020, tomó tanto material que se podían ver partículas alejándose lentamente hacia el espacio antes de que este se guardara en el contenedor.
La muestra real del asteroide no se develará hasta el 11 de octubre en una transmisión en vivo de la NASA. Mientras tanto, se está llevando a cabo el análisis rápido de una muestra tomada del exterior de dicho instrumento, que podría ofrecer los primeros resultados del material recogido en Bennu.
Los científicos creen que asteroides como Bennu podrían haber aportado a la Tierra elementos necesarios, como el agua, en los inicios de la formación del planeta, y el estudio de la muestra prístina podría responder a preguntas persistentes sobre los orígenes del sistema solar.