La curiosa nube vista a muy baja altura posada sobre una ruta

Los componentes básicos de las nubes son el agua y las partículas -de polvo, suciedad o sal marina- conocidas como núcleos de condensación de las nubes. Estos núcleos están por todas partes en la atmósfera.

Atraen el vapor de agua y, a medida que ascienden, el vapor se condensa para formar agua líquida o hielo, lo que da lugar a la creación de diminutos glóbulos llamados gotas de nube.

Mucho más pequeñas que las gotas de lluvia, las gotas de las nubes son extremadamente ligeras y se acumulan mientras flotan, mezclándose con el aire para crear las formaciones esponjosas que vemos suspendidas en el cielo.