La nave Voyager 1 de la NASA, lanzada en 1977, ha transmitido datos confusos a la Tierra, a 15.000 millones de kilómetros de distancia, lo que hace temer una posible avería.
Con una misión inicial de cinco años, se convirtió en el primer objeto fabricado por el hombre en salir del sistema solar tras 46 años de exploración continua. A pesar de la reciente confusión en las comunicaciones, la NASA espera que la sonda, ahora a 15.000 millones de millas de distancia, funcione hasta 2030, cuando acabará apagándose, dejándola a la deriva por el espacio.
Esta enigmática transmisión, rodeada de misterio, ha despertado la curiosidad de los expertos sobre el mensaje que la Voyager 1 intentaba transmitir desde los confines del espacio.
